El ya ex presidente de los Estados Unidos de América, señor Bush, dijo en su discurso de despedida sentirse orgulloso de haber cumplido con su deber y de impedir que en su país se cometieran atentados como el del 11-S, pero no aludió al hecho de que si hubiese hecho caso a sus asesores y servicios secretos, advirtiéndole que se preparaba un fuerte atentado en Estados Unidos, éste se habría evitado. Lo que vino después fue una especie de paranoia colectiva y la instalación de un estado policial, porque los dirigentes norteamericanos y los propios ciudadanos pensaban que su nación era invulnerable. Lo que vino después es que el señor Bush, inspirado por una revelación divina, decidió que el eje del mal se encontraba en diferentes puntos del globo, y, por tanto, habría que erradicarlos.
Así que se inventó la trola de que Irak poseía "armas de destrucción masiva" (idea apoyada, por cierto por el mosquetero "d,Artagnan" Aznar) e inició la invasión de ese país, que, además, para justificar más su acción, estaba gobernada por un dictador, como es uso y costumbre en la mayoría de los países árabes.
Las armas de destrucción masiva las envió el ejército comandado por el señor Bush, bombardeando indiscriminadamente a una población que ya tenía bastante castigo con soportar a Sadam Hussein. En su guerrita de Irak, cuya finalidad no era castigar a los malos, ni perseguir a Al-Qaeda, ni ahorcar al tirano sunni, sino asegurarse el suministro de petróleo de ese país, y afianzar sus estrategias para invadir otro eje del mal, es decir Irán, y ofrecer cobertura la a actuación otánica en Afganistán (otra misión imposible, en la que está involucrada España, que no sé lo que hace en un territorio que no hay quien lo organice ni lo gobierne), Bush ha fracasado totalmente. Aumentó el terrorismo y se incrementaron los muertos y las destrucciones. Ya USA tiene una excusa "para reconstruir el país", y perpetuar su presencia allí.
Pero el balance negativo del señor Bush no se ciñe solamente en estas acciones bélicas, que producen un gasto enorme a su país y han contribuido a su actual crisis y ruina económica, que, de paso, ha contagiado al resto del mundo. La poderosa nación americana, abusando de su poder y de que no hay nadie que le tosa, ni la obligue a cumplir las leyes internacionales, vulnera los derechos humanos en la base de Guantánamo y con las actividades criminales e ilegales de la CIA, o con sus intromisiones en diferentes partes del mundo. Utilizan el "todo vale" cuando ellos consideran que está en peligro su "seguridad nacional".
"El deber cumplido" del señor Bush le deja al nuevo presidente Obama el marrón de una pésima situación económica del país, el fracaso del sistema neocapitalista (con actuaciones fraudulentas y mafiosas y el tener que recurrir a las arcas del estado para intentar salir adelante) y, además, el desprestigio de la nación americana y los más intensos odios.
El señor Obama lo tiene bastante crudo y ya se verá como puede salir de este atolladero en el que le ha dejado George W. Bush. Good bye y váyase a su rancho de Texas que es donde mejor está.
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