Seis semanas concentrados en la Alcaldía
Unas cuatro mil personas, según la policía local, se manifestaron esta tarde en la capital grancanaria contra la cárcel de Juan Grande y otras instalaciones en el sur de la isla, que consideran perjudicarán el turismo de la zona.
En un ambiente festivo, haciendo sonar bocinas y silbatos, los manifestantes lucían pancartas, camisetas y carteles con distintos lemas, algunos de los cuales sintetizaban su protesta con un "No cárcel", "no incineradora", "no vertedero" y "no regasificadora".
La protesta, convocada por los vecinos del Castillo del Romeral, partió a las 19:30 horas del viernes desde el Parque de San Telmo con cientos de manifestantes, y poco después, según discurría hacia su final, en la Plaza de la Feria, fuentes de la policía local calcularon en 4.000 los participantes.
Decenas de manifestantes lucían pequeños carteles en forma de esquela con el mensaje "DEP Turismo", mientras otros sostenían pancartas con el lemas como "¿Para qué construyen esa cárcel? ¡Basta ya de chantajes con presos canarios! y "Provincia de Las Palmas = Provincia penitenciaria".


Durante la marcha, se repartieron octavillas con sus reivindicaciones y argumentos, como que la cárcel "pone en riesgo" su "principal medio de vida", que es el turismo, y que en esta zona del sur grancanario "ya se ha sido suficientemente solidario con la central térmica, el vertedero y la cantera de piedras" y no quieren ser "el trastero de la isla".
En las primeras filas de la protesta también se pudieron ver pancartas en las que se podía leer "Pueblo contra la regasificadora. ¡Urgente! Se necesitan políticos de Tenerife para salvar Gran Canaria" y "Gran Canaria se mueve. No a la cárcel más grande de Europa en Gran Canaria".
Manifiesto íntegro:
¡Tirajaneros!,_ ¡Grancanarios!,_ ¡Canarios de todas las Islas!
Si se preguntan por qué un Colectivo Vecinal está haciendo el trabajo que corresponde a nuestros representantes políticos, la respuesta es sencilla: porque nuestro grado de indefensión es escandaloso. Aunque seguimos confiando que en el futuro obtendremos apoyo institucional, ya no esperamos por ellos para resolver nuestros problemas.
Esta lucha está motivada en su mayor parte por el abandono a nuestra suerte de una Corporación Municipal que dice apoyar nuestra causa y no mueve un dedo, de un Cabildo lacayo de Madrid que muerde la mano que da de comer a casi todos, de un Gobierno Autónomo que con una mano nos defiende y con la otra nos vende, y de un Estado ciego y prepotente, del que estamos recibiendo el mismo trato que una colonia bananera.
El porqué de esta lucha todos lo sabemos. Debemos detener este despropósito. Nuestros hijos y nietos nos preguntarán en el futuro si hicimos todo lo posible por evitarlo, y habrá que responder que sí. Nuestro poder es la Unión, y nuestras armas son la imaginación y el respeto por las Leyes.
A bastante gente le cuesta admitir que sus servidores públicos estén tomando decisiones irresponsables, y esto les inclina a pensar que todo se reduce a que un puñado de vecinos quiere trasladar su problema a otro sitio. Sabemos que este argumento lo utilizan los promotores del proyecto para desviar nuestro mensaje, y como disponen de todos los medios para hacerlo, tenemos grandes dificultades para que la opinión pública nos escuche.
La Macrocárcel:
Almacén de 5.000 seres humanos con políticas de reinserción obsoletas e inútiles que agravan la marginalidad de los reclusos. Se pretende construir demasiado cerca de la principal fuente de ingresos de la isla, cuando existe un riesgo cierto de incidencia en el turismo. Hemos requerido informes de impacto en la actividad turística, y éstos no aparecen por ninguna parte. Los responsables del proyecto se limitan a compararse con la isla de Mallorca, cuando la realidad grancanaria y balear tienen poco que ver.
Y si lo anterior no fuese lo suficientemente grave para paralizar inmediatamente el proyecto, junto a la prisión se pretenden realizar otras construcciones complementarias, como un centro de menores inmigrantes, depuradora de aguas fecales, emisario submarino, hospital penitenciario, comisaría, etc., todas prácticamente unidas a Juan Grande y Castillo del Romeral, poblaciones tradicionales y cercanas a zonas de especial protección medioambiental, infringiendo las leyes que crearon las mismas instituciones que ahora la imponen.
Las obras han empezado ilegalmente. El plan territorial, aún no está aprobado debido a que fue manipulado para decidir la ubicación en Juan Grande. Nosotros hemos sacado a la luz 9 irregularidades por las cuales debería ser revisado. Además, no son propietarios del terreno, no tienen permiso de obra, no tienen declaración de "interés general" por el consejo de ministros y lo mas grave carecen de informe de impacto ambiental, lo que ha ocasionado un atentado ecológico, perdidas a los cultivadores y mas de 350 denuncias de los vecinos, por la afección del polvo a su salud.
Las obras se realizan en una de las mejores tierras de cultivo de la isla, donde se plantaba el millo, que producía el gofio que salvo del hambre a muchos canarios en otras épocas y que están declaradas Reserva Agraria Estratégica por si ocurre una crisis alimenticia mundial.
Nos acusan, al oponernos a la macro cárcel, de ser insolidarios con los presos, pero nosotros no negamos que sea necesaria una nueva cárcel, lo que si consideramos muy negativo es su ubicación a la entrada de Maspalomas y su macro tamaño.
Consideramos que la prisión es necesaria, pero también la unidad de madres proyectada en Jinamar, y centros de desintoxicación, para los cuales no hay la misma prisa en construir.
Le queremos comunicar a los familiares de los presos de Salto del Negro que una macro prisión, como la que se quiere construir aquí, de las mas grandes de Europa, no cumple las funciones de rehabilitación y reinsersión. El trato con los reclusos se producirá de forma deshumanizada, disminuyéndose el ratio de funcionarios por presos, procediéndose a la vigilancia con medios electrónicos, por lo que allí lo que regirá será la ley del mas fuerte.
Sepan el futuro negro que nos espera: Esta semana la Federación de Touroperadores Europeos pidió a la Consejera de Turismo del Gobierno de Canarias que hiciera lo posible por parar las obras de la Macro Cárcel. La Federación está muy preocupada por el enorme impacto visual y medioambiental de esta infraestructura, junto con las que ya se han construido y teme por el aumento del nivel de delincuencia debido a los presos en régimen abierto. Creen que cuando los turistas se enteren de la instalación de la Prisión al lado de los complejos, donde van a pasar sus vacaciones, quieran dejar de visitar Gran Canaria.
La Regasificadora: Expertos independientes, o sea, que no cobran de los promotores, descartan las fuentes de energía procedentes del gas como alternativa responsable. Además, recomiendan alejar estas instalaciones como mínimo 15 Km. de cualquier núcleo urbano. Pues bien, se pretende construir una planta a una décima parte de esta distancia, quedando dentro del área de peligro una población de alrededor de 80.000 personas. Y como no, la quieren construir de nuevo en nuestra comarca. No la queremos en San Bartolomé, ni en ningún otro lugar de la Canarias.
El Vertedero: Durante los 20 años desde la instalación de dicho complejo se ha incumplido sistemáticamente todas las normas que regulan el tratamiento de residuos. Los contribuyentes han estado pagando por un reciclaje inexistente. El porcentaje de enfermos de cáncer entre la población cercana, principalmente Juan Grande, son anormales, y su prometido cierre está cada vez más lejos. Ahora, en vez de cumplir tal promesa, se le quiere añadir una incineradora de residuos. Dicha infraestructura, descartada como las anteriores en muchos países de la Unión Europea, estará gestionada por los mismos adjudicatarios del vertedero. Dudamos seriamente de su preocupación por las emisiones tóxicas.
La Central eléctrica: Media isla recibe sus servicios, pero nosotros no sabemos ni qué aire estamos respirando. No nos llegan los resultados del control de sus emisiones, si es que los están haciendo.
La Cantera de piedras: Cuando cambia el viento y no respiramos el humo de la Central, aún nos queda el polvo de este destrozo paisajístico. Que impacta negativamente en el paisaje y que todos los visitantes ven antes de llegar a Maspalomas. Además sirve de escombrera y deposito de materiales de construcción.
Aquí nadie informa, ni se nos explica nada, y presagiamos que seguirán llegando a la zona todos los equipamientos negativos que rechacen los demás municipios hasta convertirse en la comarca trastero de la isla, a la entrada de Maspalomas, gracias a la nula capacidad demostrada por nuestros representante locales. ¿A alguien se le ocurre poner el retrete a la entrada de su casa?
Es patético que nos vengan hablando de beneficios, y puestos de trabajo, todavía estamos esperando por los que nos prometieron por el vertedero y la central térmica. Se benefician de la falta de información, y de tener a muchos medios de prensa de su lado que nos censuran la difusión de nuestras acciones. Pero los habitantes del Sur estamos informados y no nos van a engañar. Ahora queremos que se conciencie el resto de los grancanarios.
Tomen nota del nombre de los responsables. De los que se declaran a favor y de los que se callan. Graben lo que dicen, guarden lo que escriben. Identifíquenlos ahora, porque después irán a esconderse. Ténganlo en cuenta dentro de 3 años en las elecciones.
De todo esto ha surgido una cosa buena y es que cada vez hay más personas unidas a nuestra lucha. Lo que tenemos claro es que un pueblo unido luchando contra una injusticia, no puede ser vencido.
Gracias por venir y sepan que el Consejo Abierto de Vecinos de Castillo del Romeral tiene memoria y no olvidará a quienes hoy han apoyado esta lucha. Allí tienen unos vecinos, unos amigos, unos hermanos para cualquier lucha que defienda una Canarias donde el eco de los que sufren y luchan resuenen en sus barrancos y playas con la fuerza de un volcán.
Que cada pueblo, cada barrio, se active y erupcione en un río de lava vecinal que marque el camino de su crecimiento y desarrollo, que fiscalice sus instituciones, que supervise sus recursos y que motive la participación de los ciudadanos.
Y por último, como dice la letra de nuestro himno:
¡ Ven, quiero oir tu voz!
Y si aún nos queda amor
Impidamos que esto muera.
Fotos: Acfi-Press
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.129