Playa de Mogán dedica una escultura a Pedro Ulla y revive el afecto por su vecino más querido

Playa de Mogán recordó ayer a Pedro Jesús Jiménez Rivero, conocido como Pedro Ulla, con la inauguración de una escultura en la plaza Doctor Pedro Betancor. Vecinos, familiares y representantes municipales llenaron el espacio para acompañar la figura que ahora permanece en el corazón del barrio marinero.

La ceremonia combinó emoción y recuerdos. Antes de descubrir la escultura, los asistentes vieron un vídeo con imágenes de Pedro Ulla en su vida diaria, mostrando su carácter afable. La alcaldesa, Onalia Bueno, destacó su bondad y lo entrañable de su personalidad, mientras que familiares y amigos compartieron anécdotas que reflejaban su cercanía y generosidad.

Pedro Ulla creció en Playa de Mogán y desde niño aprendió a nadar con los marineros. Con el tiempo se convirtió en una presencia habitual del barrio: su carro lleno de pescado fresco y su disposición para ayudar a vecinos y comerciantes dejaron huella en todos. Las pequeñas propinas que recibía las destinaba a regalos para su familia o a cubrir necesidades en su hogar.

La escultura, obra del artista Paco Suárez, incorpora elementos que remiten a su vida cotidiana, como el carro y las cajas de pescado, convirtiéndose en un símbolo del vínculo entre Pedro y su barrio. Los vecinos celebraron la iniciativa, que nació de una moción plenaria aprobada por unanimidad, como un reconocimiento a quien dejó una profunda huella en Playa de Mogán.