El modelo canario de desarrollo sostenible se presentó como ejemplo ante la Comisión Sectorial de la Agenda 2030, en la que el Ejecutivo autonómico defendió una hoja de ruta propia, cimentada en evidencia científica, participación ciudadana y compromiso con el territorio, con el propósito de construir unas islas más igualitarias.
En esta línea, Octavio Caraballo, viceconsejero de la Presidencia, explicó los fundamentos de la estrategia: el Comité de Personas Expertas, un sistema de indicadores, cinco grupos de pilotaje de la Agenda Canaria de Desarrollo Sostenible 2030 y las Rutas 2030, instrumentos que articulan la colaboración entre administraciones, ciudadanía y tejido económico para avanzar en los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Destacó además la transferencia de conocimiento desde las universidades hacia los municipios rurales y de medianías, elemento esencial para asegurar una igualdad real de oportunidades; ya que la condición de archipiélago fragmentado y región ultraperiférica exige la formulación de respuestas adaptadas que, a su juicio, pueden servir de inspiración a otros territorios.
Caraballo señaló también la cultura, la cohesión territorial, la justicia intergeneracional y la implicación directa de la sociedad como ejes centrales de un proyecto diseñado desde la cercanía; y así, fruto del conocimiento técnico y del diálogo con los territorios, transformar los ODS en avances concretos que impacten en la vida de las personas.
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