El Gobierno de Canarias ha dado por finalizada este viernes a las 08:00 horas la situación de alerta por lluvias y la prealerta por riesgo de inundaciones en todo el archipiélago, tras remitir los efectos de la borrasca ‘Olivier’, que ha dejado más de 200 incidencias en las islas, según ha informado en un comunicado.
En Gran Canaria, se reportaron desprendimientos en la GC-75 (Moya-El Pagador), en la GC-220 (Hoya Pinea, Gáldar), y se mantiene el cierre de la GC-605, que cruza por el cruce de Ayacata, y de la GC-200, a la altura de Faneque.
No obstante, ya se han reabierto la GC-60 en el kilómetro 24+500, antes de llegar a Tunte, y la GC-752 en el kilómetro 0+100, en la subida a Moya. Desde primera hora de la mañana, operarios trabajan en varias carreteras de la isla donde se han producido desprendimientos de piedras, por lo que se recomienda extremar la precaución.
Según el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (CECOES) 112, desde el inicio de la alerta el pasado miércoles se han registrado 236 incidencias: 135 en Tenerife, 52 en Gran Canaria, 19 en La Gomera, 13 en La Palma, 9 en Lanzarote, 5 en El Hierro y 3 en Fuerteventura. La mayoría estuvieron relacionadas con desprendimientos en carreteras, achiques de agua en viviendas y calles, y problemas en el suministro eléctrico o el alumbrado público.
El Ejecutivo autonómico ha subrayado que no se han producido daños personales durante este episodio de fenómeno meteorológico adverso.
Aunque la alerta ha concluido, se espera que durante las próximas 48 horas puedan producirse lluvias moderadas, puntualmente fuertes en algunas zonas, por lo que se recomienda precaución en los desplazamientos por carretera.
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