Con el fin del verano a la vuelta de la esquina, niños y adolescentes han dejado atrás los días de playa y diversión, dando la bienvenida a un nuevo curso escolar. Este año, además de los clásicos reencuentros y nuevas mochilas, hay una novedad importante: se prohíben los teléfonos móviles en clase.
La medida, según un comunicado, busca proteger al alumnado de distracciones y problemas de salud mental, mientras se promueve un mejor rendimiento académico.
Así que, a partir de ahora, los móviles quedarán guardados durante la jornada escolar en los niveles de educación infantil, primaria, secundaria obligatoria y ciclos formativos de grado básico, mientras que, en los niveles superiores, como bachillerato, las restricciones dependerán de la madurez de los estudiantes
Sin emabargo, habrá algunas excepciones: los móviles podrán utilizarse en situaciones especiales, como por motivos de salud o si se aprueba su uso con fines pedagógicos específicos por el Consejo Escolar. Eso sí, quien no respete las normas verá su teléfono retirado hasta el final del día.
En cuanto a las normas generales en los centros educativos, no hay grandes cambios, aunque se pondrá mayor énfasis en los protocolos de protección de datos, bienestar emocional y otros procedimientos que buscan mejorar el entorno educativo.
Así que, queridos estudiantes, toca recargar las pilas y dejar los móviles para después del cole.
¡Feliz vuelta a clases!
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