La Guardia Civil ha intervenido 23 kilogramos de pescado que carecían de la preceptiva documentación legal de trazabilidad, durante una inspección realizada en un restaurante de Los Llanos de Aridane (La Palma).
La operación fue realizada por agentes de Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) en colaboración con el Servicio de Inspección Pesquera del Gobierno de Canarias, según ha especificado este miércoles la Guardia Civil en un comunicado.
El pescado intervenido fue descubierto por los agentes durante la inspección del local y se encontraba almacenado en congeladores, que contenían viejas, alfonsiños, sargos, gallos y pulpos, y el responsable del establecimiento no pudo aportar la documentación que acreditara los controles de trazabilidad que indican su legítima procedencia.
Conforme a ello, los agentes notificaron al establecimiento varias actas denuncia en relación con las infracciones observadas, y que se encuentran reguladas en la Ley de Pesca de Canarias y que han sido remitidas a la autoridad competente en materia sancionadora.
Se trata de infracciones por carecer de la documentación necesaria para acreditar la legítima procedencia del pescado, cuya sanción puede oscilar entre los 600 y los 60.000 euros, y las correspondientes a la sanidad e higiene de los alimentos pueden llegar hasta los 15.000 euros.
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