Antonio Ojeda, más conocido como 'El Rubio', rompe su silencio. Pocos días después de conocerse la reapertura del caso de la desaparición de Yéremi Vargas por parte del Juzgado de Instrucción número 2 de San Bartolomé de Tirajana, el sospechoso se reafirma en que es inocente. "Estoy lleno de impotencia; no he hecho nada", relata, confirmando que si el juez le cita, irá a declarar: "Nunca tengo nada que esconder".
Cabe destacar que la reapertura del caso ha llegado después de que el abogado Marcos García Montes, en representación de la familia de Yéremi Vargas, presentara un contundente escrito de 45 páginas al que ha tenido acceso TIEMPO DE CANARIAS en el que la defensa apunta directamente a la posible participación de 'El Rubio' en lo ocurrido con el menor durante la tarde del 10 de marzo de 2007, asegurando en el mismo haber obtenido "datos recientes" que demostraban "la improcedencia del archivo de la causa" con la aparición de "nuevos indicios".
En el auto de reapertura con fecha de 2 de septiembre, facilitado por García-Montes, el juez Juan Manuel Hermo Costoya pide al Ministerio Fiscal que se pronuncie sobre esta decisión, por lo que la familia de Yéremi y el abogado confían en que el Ministerio Público se muestre favorable para que se puedan practicar las diligencias solicitadas. Estas, que figuran en la resolución del juez, se refieren a la identificación de los responsables de la desaparición del niño, averiguación de las circunstancias que rodean su comisión y los medios de prueba que puedan considerarse necesarios.
Sobre ello, 'El Rubio' se muestra tranquilo. En declaraciones al periódico Canarias 7, el sospechoso insiste en que no tiene "nada que ver con eso". "Todo esto es porque la gente que ha venido detrás de mí no cesa (...). A mí me metieron un marrón y me comí cinco años sin culpa ninguna y no fui yo", declara en referencia a la condena que cumplió en prisión por agresión sexual a un menor de edad en El Doctoral, allá por el año 2012, aunque el caso no tiene relación con la desaparición de Yéremi. "Había testigo y los mismos guardias civiles que me metieron en eso, intentaron meterme en esto. Fue una venganza personal", prosigue.
"Me cogieron de cabeza de turco y ahí abajo, en el pueblo, hay mucha gente que no ha hablado pero que sabe la verdad y que yo no he hecho nada de esto", continúa, asegurando que "los guardias civiles que vinieron de Madrid lo hicieron porque los llamaron los de aquí que me metieron en el marrón este por el que perdí cinco años sin tener culpa ninguna". "Yo no tengo culpa de nada", insistió. Además, aseguró que a la familia de Yéremi le diría que él no ha hecho "nada".
"Yo no estoy a mal con nadie, me han puesto en contra de todos y no tengo nada que ver. Esa pobre mujer me ha dado mucha pena -Ithaisa Suárez- e incluso una vez que quisieron archivar el caso, hace ya muchos años, buscaban firmas para evitarlo y yo firmé. Ahí está la firma para que lo comprueben. No tengo nada que ver, solo intenté ayudar porque preguntaban si alguien había visto algo", sentencia.







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