Hospitales Universitarios San Roque, único en Canarias en incorporar la Hipertemia Oncológica

La Hipertermia Oncológica es un nuevo tratamiento que permite calentar un tumor a altas temperaturas sin dañar los tejidos sanos adyacentes y que está disponible en el servicio de Oncología Radioterápica de Hospitales Universitarios San Roque en Las Palmas de Gran Canaria, único centro en Canarias que dispone de esta tecnología.

Desde le punto de vista molecular, la hipertermia inhibe la reparación del ADN tumoral tras la radioterapia, altera la membrana de las células tumorales, favoreciendo la entrada de la quimioterapia y potencia la respuesta del sistema inmune a la inmunoterapia.

La Hipertemia Oncológica se basa en esta premisa, de tal manera que si pudiéramos calienta selectivamente el tumor sin calentar los tejidos sanos adyacentes, se podría  ayudar a frenar las agresivas capacidades de las células tumorales sin alterar las células sanas.

La utilidad fundamental de este tratamiento se centra en cánceres avanzados y metastásicos, sobre todo en tratamientos de combinación con radioterapia y quimioterapia. La hipertermia “sensibiliza” los tumores haciéndolos menos resistentes a los otros tratamientos oncológicos clásicos y por tanto incrementando las posibilidades de éxito de los mismos.

La hipertermia se administra mediante 2 o 4 antenas que emiten una radiofrecuencia de 13,5 Mhz que calienta los diversos tejidos. Los órganos sanos son capaces de enfriarse por si solos, mientras que el tumor no tiene esa capacidad. Por tanto el tumor se calienta y conseguimos descomponer su biología agresiva,  de forma rápida y segura. A diferencia de los tratamientos oncológicos clásicos como la quimioterapia o radioterapia, el tratamiento puede repetirse tantas veces como sea necesario, porque no produce daños  acumulativos en los órganos sanos.

Los efectos biológicos de la Hipertermia sobre las células tumorales ,se mantienen durante 72 horas por lo que habitualmente se administran dos sesiones de hipertermia oncológica a la semana. La duración estándar del tratamiento es 60 minutos.