Vecinos de Timanfaya denuncian ruidos desde la reapertura del bar

Vecinos de Timanfaya han denunciado ruidos desde la reapertura del bar situado en la zona residencial, propiedad del Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana. El Bar Timanfaya reabrió el pasado septiembre de 2019 cuyo ruido estacionario se produce desde las 7 de la mañana hasta las 24 horas a más de 100 metros, según la denuncia que mediante escrito han remitido a Maspalomas Ahora.

El ruido continúa con mayor intensidad debido a la reforma realizada en el sistema de extracción de humos que ha incorporado una chimenea metálica en la parte posterior que anteriormente no existía, “desconociendo si con conocimiento del Ayuntamiento y la aprobación del técnico correspondiente”, afirma el comunicado.

Es por ello, que desde el pasado 2 de octubre uno de los afectados presentó una denuncia en el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, así como solicitado por escrito la documentación referente al expediente del bar y licencia de apertura que reclama como derecho según la Ley de Transparencia. Sin embargo, hasta el momento solo ha obtenido el “silencio por parte de la administración local”, asegura.

El malestar de los vecinos es aún mayor ya que el bar es frecuentado “por funcionarios municipales, técnicos y concejales durante el tiempo de descanso en la jornada laboral, por lo que la inactividad del Ayuntamiento para evitar el ruido es total”.

Se da la circunstancia de que el administrador único de la empresa que actualmente gestiona la concesión administrativa, entró en la casa de uno de los afectados para comprobar desde el dormitorio el ruido que emana desde el establecimiento “sin que haya puesto los medios para evitarlo”, añade el escrito.

En opinión de los afactados el Ayuntamiento “debe hacer cumplir la ordenanza contra el ruido que ellos mismos aprobaron, la Ley 7/2011 de 5 de Abril de actividades clasificadas y espectáculos públicos y el decreto 86/2013 de 1 de Agosto por el que se aprueba el Reglamento de actividades clasificadas y espectáculos públicos”, concluyen.