Por consiguiente, antes de la moción de censura

Dejamos pendiente hasta la próxima semana las nuevas escapadas de nuestros representantes públicos desde el Aeropuerto  81, por donde circulan al más puro estilo vintage ochenteno retrorústico, con ese aire hortera que los distingue del resto de viajeros. Mientras tanto, urge Santa Lucía, la caja de Pandora de la política en la mitad sur de la isla. Un día sí y otro también nos ofrece el penoso espectáculo de patio de recreo. Como sabrán, el alcalde Santiago ha despojado de la Primera Tenencia de Alcaldía a la concejal díscola del Grupo Mixto (que fue expulsada de Podemos), Beatriz Mejías. Dice el regidor que pasadas dos semanas de sus polémicas declaraciones contra sus compañeros de gobierno no ha rectificado “públicamente”.

Por consiguiente, como decía Felipe, se pone en riesgo la estabilidad del gobierno, añade el alcalde que ha nombrado curiosamente a Marcos Rufo como sustituto. Resulta cuanto menos suspicaz este cambio de última hora y no convence el argumento.

Nos preguntamos ¿por qué Marcos Rufo del PP y no alguien de AV? ¿Será que las relaciones de los auvistas van de mal en peor con populares y fortalecidos? ¿Quién ha recusado al alcalde porque no le permite que disponga de una plaza en el Cabildo? ¿Tiene la misma simpatía con el recusante, el recién nombrado  primer teniente de alcalde, que también podría permitir que ocupase la plaza? Pues ya sabes Mejías, abandona la casa.