El Cabildo de Gran Canaria ha construido un muro en el tramo de la GC-500 que discurre entre Taurito y Playa de Mogán para presevar la seguridad y evitar el paso de turistas y ciclistas, que pese a las advertencias de prohibición se saltaban el perímetro.
La peligrosidad del tramo, que lleva casi dos años cerrado, tras los desprendimientos donde una mujer y su hijo sufrieron un accidente en julio de 2017, no persuadian a los transeúntes.
Sobre la acción del Cabildo, la alcaldesa de Mogán, Onalia Bueno, ha aprovechado para recordar que aún “estamos esperando a que esa propia administración se pronuncie sobre las alternativas que se le han propuesto desde el Ayuntamiento, sin obtener respuesta alguna desde hace más de un año”.
Una de estas alternativas para solucionar el acceso a Playa de Mogán de toda clase de vehículos pasaría por la finalización de un estudio técnico que inició el Cabildo de Gran Canaria hace más de siete meses (un año desde que se realizó la primera petición por parte el Ayuntamiento).
El informe pretende la modificación del tramo de la autopista GC-1 desde Puerto Rico hasta Playa de Mogan, para que se convierta en carretera y facilite la circulación todo tipo de vehículos, incluidos los de licencia municipal.
La segunda alternativa, a medio plazo, y que cuenta con adjudicatario, es la construcción de un túnel corto en la misma carretera GC-500 que una Taurito con Playa de Mogán, con coste de unos 4 millones de euros, y que salvaría la peligrosidad de las curvas y de los posibles desprendimientos que se pudieran ocasionar. Se trata de una obra del Gobierno del Canarias.
Otra de las alternativas, ésta a corto plazo, es un estudio de viabilidad encargado al Gobierno de Canarias para convertir los ramales de acceso de la autopista GC-1 que discurre entre Puerto Rico y Taurito, y de Puerto Rico a Mogán en accesos de doble sentido para facilitar la circulación en más direcciones, al igual que el de Taurito a Las Palmas.
Se trata de obras que debía realizar el Cabildo del Gran Canaria, sin embargo, a pesar de que la institución insular niega competencias en la vía, Bueno se pregunta por qué entonces realizó obras de emergencias en otras vías donde no tiene este tipo de competencias como en los pasados desprendimientos de la GC-500 cuando cayeron las primeras piedras, o la colocación del alumbrado en los túneles de Tiritaña y Los Frailes.
La regidora municipal ha lamentado la nula “voluntad del Cabildo” para solucionar los problemas de esta vía, y finalmente haya sido el Gobierno canario quien haya asumido “su responsabilidad”.
Sin competencias
Por su parte, el Cabildo de Gran Canaria ha negado sus competencias en esta vía ya que asegura que se trata de titularidad regional por lo que la solución de futuro corresponde única y exclusivamente al Gobierno de Canarias.
El Cabildo solicita la máxima colaboración de la ciudadanía porque no respetar los cierres de las carreteras "no solo es un acto de irresponsabilidad porque supone un riesgo real sino que conlleva una importante sanción".
En este sentido, el cierre responde a la obligación del Cabildo de preservar la seguridad de las personas en las vías insulares o en aquellas en las que asume la competencia de su conservación y mantenimiento como es este caso, y la acomete siguiendo las indicaciones técnicas.
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.129