La Fiscalía pedía prisión para los encausados
La Magistrada-Juez del Juzgado de lo Penal 2 de Las Palmas de Gran Canaria, Mónica Oliva Gutiérrez, ha absuelto este jueves a José María y Mónica Luque de un delito de desobediencia, para los que la Fiscalía pedía penas de prisión, al quedar demostrado que un error administrativo en el precinto del Ayuntamiento no concretó las obras a precintar.
Los encausados, socios de la entidad Light House Enterprise SL, habían sido denunciados por la Fiscalía de Las Palmas ante los reiterados incumplimientos municipales de suspensión y paralización de las obras que se ejecutaban en el local, durante el mes de marzo de 2013 al no contar con licencia municipal.
Las obras consistían en el revestimiento de madera de dos estructuras metálicas en la zona destinada a la terraza, sin la licencia municipal preceptiva, según informó Canarias Ahora en una noticia recogida por este diario.
La sala entiende que se produjo una confusión con las obras realizadas por un “error involuntario por parte del Ayuntamiento”, que se basa en unos trabajos que observan inicialmente, y en lugar de concretar más, incluso aclarar el Decreto desde el momento que se observa el primer quebrantamiento con el fin de expresar que se refería a cualquier obra a realizar en ese lugar hasta que obtuviera la preceptiva licencia, se mantiene la descripción del inicio, señala.
Confusión
Esta confusión ha servido de base a los socios para que continuaran con las actuaciones de mantenimiento del local, pero no se considera autores de una infracción penal sino administrativa.
En el juicio, no negaron haber tenido conocimiento de la resolución del Ayuntamiento, y tampoco que tras el precinto continuaran con las obras.
Sin embargo, el Ayuntamiento no concretó los detalles del precinto. Incluso los cuatro policías locales actuantes, así como el técnico municipal entendían que no se podía realizar cualquier obra en la terraza, “pero lo cierto es que en las resoluciones dictadas no quedaba claro”, señala la sentencia.
Ante esta incertidumbre, podría decirse que los encausados se “aprovecharon” de esa falta de concreción o error para continuar con los trabajos, “pero ello no es suficiente para proceder a condenarlos por la vía penal”, añade.
Por otra parte, ninguno de los policías locales que declararon en el juicio recuerda en sus visitas posteriores que se estuviera trabajando en las estructuras denunciadas. Incluso el técnico municipal manifestó que se estaba trabajando en el suelo “reparando la instalación eléctrica y en los toldos… pero que cree que la pérgola ya estaba revestida”.
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