NC pide al Gobierno que retire la ley que pone "en peligro" el futuro turístico

Nueva Canarias (NC) pedirá a los grupos parlamentarios en el pleno previsto para la próxima semana que se sumen a su demanda para que el Gobierno regional retire la reforma de la ley turística, al considerar que pone en peligro el futuro el sector en las islas.

El portavoz parlamentario de NC, Román Rodríguez, afirma en un comunicado que con esta ley se vuelve al "fracasado" modelo de la oferta masificada, sin garantizar la cualificación y desregular el territorio.

El diputado nacionalista avisa de que, "sin límites" para la construcción de establecimientos alojativos, "deterioramos la calidad de la oferta y debilitaremos la renovación" de las áreas obsoletas.

Rodríguez defiende la permanencia de los límites cualitativos y cuantitativos del crecimiento en función del modelo turístico de cada isla además de impedir la clasificación de nuevo suelo para uso turístico.

NC ha presentado una enmienda a la totalidad al proyecto de ley de Modificación de la Ley de Renovación y Modernización Turística de Canarias porque, añade Rodríguez, se eliminan las limitaciones aún vigentes a la construcción de nuevos establecimientos alojativos turísticos y en la práctica "se deroga lo que quedaba" de la moratoria turística.

Regulación

Román Rodríguez denuncia la pretensión de CC y PSOE de "eliminar" cualquier tipo de regulación de la actividad turística, un planteamiento "ultraconservador y liberal más propio de los años 60".

El portavoz nacionalista denuncia que se pone "en peligro el éxito" futuro de Canarias, como uno de los principales destinos turísticos europeos, al volver al "fracasado" modelo del incremento de camas, en lugar de apostar por un crecimiento cualificado, por la reconstrucción, por las limitaciones y por la diferenciación de sus competidores.

"En realidad es como si se dejara la barra libre a la construcción de hoteles y apartamentos turísticos. Todas las leyes impulsadas por el Ejecutivo de CC y PSOE en materia territorial y turística, incluida esta última reforma, para NC, suponen la liquidación de las directrices de ordenación del turismo de 2003", afirma.

El objetivo final es que el Ejecutivo se quede, a través de las leyes de simplificación territorial y de la tramitación preferente de las inversiones privadas estratégicas, con "todo el poder para decidir lo que se hace en el territorio y quién lo hace, ninguneando a los cabildos y ayuntamientos", pues se trata de centralizar el poder sin respetar los modelos decididos por cada isla, asevera el líder de NC.