Detenidos diez extranjeros con orden de búsqueda este año en Gran Canaria

 La Policía Nacional ha detenido a diez extranjeros fugitivos de la justicia buscados por órdenes internacionales en lo que va de año en Gran Canaria, donde se habían ocultado aprovechando la gran población flotante que hay en esta isla turística para ocultarse, según ha anunciado hoy.

Un holandés identificado como C. Brus, reclamado por las autoridades belgas acusado de actividades ilícitas desarrolladas supuestamente aprovechando que ocupaba un cargo en la Dirección General de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión Europea, y un alemán cuyas siglas son R.R. y al que se imputa tráfico de armas son dos de esos detenidos.

Así se explica en un comunicado de la Jefatura Superior de Policía de Canarias donde se precisa que al alemán R.R. se le buscaba por la venta de explosivos militares de la antigua Yugoslavia para cargar minas y granadas de mano, así como armas de fuego y de guerra y numerosa munición y que el holandés C. Brus se asentó en el sur de Gran Canaria tras haber huido antes a Argentina.

Desde allí decidió luego viajar a la isla y esconderse en ella, se relata en el escrito, donde se destaca que el acusado "no realizó ningún trámite administrativo con sus datos de filiación a fin de evitar ser detectado, si bien no pudo eludir la acción policial" y finalmente fue arrestado.

De los otros ocho extranjeros detenidos en Gran Canaria en lo que va de 2014 en virtud de órdenes de búsqueda internacionales, la Jefatura Superior de Policía regional no ofrece detalles salvo que han sido arrestados a requerimiento de Suecia, Alemania y Polonia y por la comisión de delitos como agresiones sexuales, robos, estafas y otros delitos contra el patrimonio y el orden socioeconómico.

Esas acciones han sido resultado del trabajo de investigadores de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Las Palmas coordinados con el Grupo de Localización de Fugitivos Internacionales de la Comisaría General de Policía Judicial, se subraya en la nota.

Y se expone que ese trabajo es necesario debido a que "la importancia del archipiélago como referente turístico, con conexiones aéreas directas con buena parte de los países Schengen y con una gran población flotante consecuencia de la oferta alojativa, convierten a las Islas Canarias en un buen lugar de ocultación para los delincuentes internacionales".