Las esculturas de Antonio J. Rodríguez inauguran la temporada de exposiciones

El polifacético monitor artístico Antonio Javier Rodríguez González (Las Palmas 1964), expone sus últimos trabajos escultóricos en la Galería de la Casa Condal de Maspalomas hasta el próximo 15 de febrero. Con esta muestra se inaugura la nueva temporada expositiva en esta sala de arte municipal.

Las 14 obras de pequeño y mediano formato que presenta en Maspalomas este superviviente de la llamada ‘Generación Perdida’, especialista en el diseño gráfico y digital, bucean mayoritariamente en el maridaje natural de la madera y la piedra.

En sus esculturas, aquí agrupadas como “Imagen Interior”, Rodríguez González atrapa a los espectadores con una proyección árida pero poderosa de su visión sobre el sexo en las formas de la naturaleza, con una clara influencia africanista.

Rodríguez González trabaja con limpieza las maderas de sapelly y de limonero, y utiliza la piedra de rodadura marina como elemento de ensamblaje y como soporte vivo de su creatividad, tal y como concretan y reflejan sus obras centrales ‘Nido’ y ‘Sorpresa’, en las que se plantea como un bucle daliniano la eterna pregunta sobre los orígenes de la creación: ¿Qué fue primero, la piedra o la madera?, ¿el huevo o la gallina? ¿los sexos del hombre o la mujer? con una respuesta interminable.

Formado en la Escuela de Artes Aplicadas Luján Pérez, donde se graduó en la rama de publicidad, los horizontes artísticos de Antonio Javier Rodríguez González se disparan en todas direcciones y abarcan distintas disciplinas: diseña, pinta con distinta técnica, escribe, esculpe, hace teatro, fotogrtafía, rueda cortometrajes, es el autor del blog ‘Las cosas del búho Toms’, e incluso cocina.

Impulso artístico

Sus inicios artísticos surgieron de una pregunta personal sobre el porqué de la ausencia de la asignatura de plástica y su escasa importancia académica entre tantas asignaturas difíciles, y del ánimo que le insuflaron sus primeros profesores para que plasmara sus inquietudes tempranas a través del dibujo.

Aunque empezó pintando, sin embargo su impulso artístico derivó hacia la talla de la madera y, sobre todo, hacia la publicidad, campo en el que decidió especializarse finalmente. Ese campo le sirvió “para mejorar artísticamente” y potenciar mucho más su imaginación.

Las obras que ahora expone en Maspalomas, dice, “son un recorrido por mi vida hasta este momento. En cada una de ellas me ha inspirado algo que he visto y que he sentido”.

Rodríguez González ya participó el pasado octubre en la I Feria de las Artes y la Artesanía de Maspalomas. Gran parte de su trayectoria artística la ha desarrollado en la ciudad de Telde como diseñador publicitario. No descarta convertirse en profesor de talla de madera en este municipio a través de la Universidad Popular de San Bartolomé de Tirajana.