Instalaciones que se caen

Y para terminar (por hoy), la piscina. La última ofensiva de Marco Aurelio es la piscina municipal de El Tablero. Como recordarán, un comunicado oficial nos informó con todo detalle sobre el estado de esta infraestructura que costó la friolera de 1,3 millones de euros y en casi dos años de uso se repara de manera urgente. Nadie sabe por qué costó esa elevada cantidad, y menos aún por qué duró tan poco. El tema tiene su aquel, y a los comentarios del respetable nos remitimos. Afortunadamente, como ya dijimos, las obras que realiza el contratista no suponen coste alguno para el ayuntamiento y en unas dos semanas la instalación acuática estará a pleno rendimiento. El concejal de Deportes, Roberto Martel, no entiende como se ha podido llegar a la situación actual y menos aún el importe total de la obra, a cuya inauguración su grupo no acudió, aunque formaba parte del tripartito. Algo sospecharían. A propósito de obras del anterior gobierno, con AV incluido excepto los cinco meses antes de las elecciones, otra de las obras defectuosas las hemos encontrado en las canchas de pádel de El Pajar, cuyos cristales se encuentran totalmente resquebrajados y no precisamente por usarlas, ya que sólo se jugaron unas cuantas partidillas familiares en el pasado mandato.