La refundación de la democracia en Canarias

Lejos de mantener una postura inmovilista ante la agónica situación política, con acuerdos y desacuerdos entre partidos bisagras, mayorías que pasan a la oposición, leyes que no reflejan la situación real de la sociedad canaria, desplazados de sus viviendas a la calle, aumento del paro… Por ello, debemos “refundar” el sistema democrático en nuestro territorio histórico, el Archipiélago Canario, apoyando a todos los pueblos hermanos ibéricos y de las islas Baleares. El sistema político debe y tiene que fomentar una democracia participativa, respetando nuestro pasado histórico, pero no atado a ninguna votación del pasado. Es el sufragio universal el sistema elegido para redefinir el régimen político, emanando de él una nueva Constitución que respete el autogobierno de los pueblos y nacionalidades históricas que componen el actual Estado español, dentro de la Europa de los Pueblos. De ahí la necesidad de incluir entre las medidas urgentes: 1. Las consultas populares debe ser el instrumento que fomente el sistema democrático participativo. Las decisiones esenciales en la esfera local, insular y nacional de Canarias deben ser consultadas en referéndum. 2. Una nueva ley electoral canaria, respetando las singularidades insulares y a sus representantes, pero que tenga presente la decisión de la mayoría de los canarios y canarias, sin ataduras con minorías insulares o de partido, que facilite el gobierno del partido o coalición más votada. 3. El apoyo a las familias afectadas por la crisis, derivando los dineros públicos al pago transitorio, mientras no puedan hacer frente al pago de las hipotecas. La ayuda familiar evitará la morosidad, con los efectos positivos sobre la banca que conlleva, evitando el desalojo de las viviendas y el aumento del número de marginados sociales. La simple entrega de la casa por el impago de la vivienda no resuelve el problema de origen, el número de sin techos. 4. El fomento del transporte público y el ahorro energético. Impidiendo los personalismos que paralicen la instalación del tren en las Islas, más teniendo presente el dinero público invertido. Los caprichos del gobierno insular entrante de no dar respuesta a las inversiones realizadas y a las obras programadas debe ser un primer ejemplo de democracia participativa, votando el pueblo de Gran Canaria su implantación y mejora del trazado, evitando un mayor impacto ambiental, coordinando el sistema con las guaguas y taxis, dando respuestas a las necesidades del futuro. 5. La apuesta real por el ahorro y la aplicación de fuentes energéticas renovables, bajando la dependencia de las energías fósiles, duras o no renovables. 6. El planteamiento de una nueva estructura administrativa, con la unificación de servicios entre los municipios, que genere menos burocracia y desarrollen, en base a la policía local, la policía canaria, no doblando presupuestos y alimentando el cuerpo de la experiencia de las policías municipales, de sus instalaciones, junto a la mejora en la formación del cuerpo de seguridad del Archipiélago Canario. 7. El desarrollo de una agricultura biológica, de calidad, con ayudas al fomento de las tierras abandonadas y al usos de nuevas tecnologías. 8. La implantación de la fibra óptica en todos los municipios del Archipiélago, que nos permita estar en la vanguardia, esencial para superar la crisis, siendo competitivos, con la aplicación de las TICs, nuevas tecnologías de información y comunicación. 9. Con una Ley Ecológica y Demográfica que busque el equilibrio entre el medioambiente y la carga poblacional, que regule las migraciones humanas en el Archipiélago Canario, en sintonía con el desarrollo sostenible. 10. La aplicación de una política económica que fomente el Desarrollo Sostenible, mejorando la industria hotelera, limitando la oferta, causante de los grandes problemas en el paisaje y el aumento desmesurado de la población, que en estos momentos de crisis se ve acentuado su efecto sobre población residente en el territorio histórico de Canarias.