El eterno problema de los ruidos acabará con la llegada de turistas a determinadas zonas de la Playa del Inglés. Hace unas semanas el departamento de Disciplina y el de Policía llegaban a un acuerdo con los empresarios de bares del Aguila Roja para que, junto a los empresarios alojativos autoregulen los ruidos. La medida funcionó los dos primeros días, como de costumbre, con el fin de que no se precinten los locales, sin embargo en la actualidad la situación de caos sonoro es la misma. Uno de los complejos aledaños se puso en contacto con los concejales Martel y Delgado para informar sobre las llamadas realizadas a la Policía Local por el ruido molesto ante el elevado volumen en los bares cercanos al complejo las noches del 22 al 24 de febrero, como pueden ver en esta foto. Los locales que producen molestias a causa del volumen de la música hasta altas horas de la madrugada perjudican el descanso de los turistas. Los infractores según los alojativos son: O'TROPICK, Flannagan's, Patrick's, Scrufy Murfhys (en el Edificio de Apartamentos Jardín del Atlántico), Apilanity, Mulligan's (en el Edificio del Aparthotel Green Field), Hopstore, Discoteca Life (en el Edificio de Apartamentos Jardín del Atlántico), y Randy, Adrian.
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