Los chiringuitos de las playas de Maspalomas empezarán a instalarse en febrero

El concejal de playas y presidente del Consorcio de Rehabilitación Turística de San Bartolomé de Tirajana, Samuel Henríquez, ha afirmado que los chiringuitos de las playas de Maspalomas y El Inglés empezarán a instalarse a partir de febrero tras unos cinco años guardados en una nave, cuyo gasto en alquiler supera hasta el momento los 120.000 euros.

En declaraciones a la Ser, Henríquez ha señalado que la empresa concesionaria vendrá a hacer una revisión para “su puesta a punto” que tardará entre dos o tres días, momento en el que se iniciará la colocación de los kioskos desde la playa de Maspalomas hasta llegar a la playa del inglés.

Sobre la instalación de los chiringuitos el concejal ha recordado que las dunas de Maspalomas y Playa del Inglés es un espacio reservado natural por lo que deberán cumplir con la normativa.

Henríquez ha asegurado que el Ayuntamiento ha llegado a una negociación para reducir el canon impuesto por la Demarcación de Costas para la instalación de los kioscos. Así, dicho canon pasaría de costar 450.000 euros a tan sólo 209.000.

“Hemos presentado en seis meses en tiempo y forma una nueva solicitud a Costas que amplía e incluye a las dos pequeñas playas que se han creado entre El Cochino y Las Burras y que reduce a la mitad el canon, mientras que el anterior grupo de Gobierno PP-AV presentó un recurso que no se pudo admitir por presentarlo de manera extemporánea, es decir, hicieron el trabajo tarde y mal”, ha asegurado el edil de Playas.

Inicio para otros cambios

Sobre el cambio que supondrá la instalación de estos nuevos chiringuitos, Henríquez ha puntualizado que “será un cambio potente pero que tiene que ir aparejado de otros cambios”. En este sentido, la intención del grupo de Gobierno es iniciar un proceso de renovación de las hamacas y sombrillas, mejorar la accesibilidad y los espacios públicos de las playas, como los aseos.

Este “lavado de cara” de las playas requiere de una inversión de alrededor de tres millones de euros, por lo que será “un proceso paulatino” que irá de la mano del Cabildo de Gran Canaria y el Consorcio de Rehabilitación Turística, ha concluido.