El canon de la discordia

Esta Ley que el gobierno de Zapatero ha promulgado conocido como en "el Canon Digital", tiene desde mi punto de vista unas connotaciones irreverentes hacía la mayoría de los españoles que somos aficionados a la música y que con frecuencia solemos adquirir grabaciones musicales en sus diferentes formatos. Zapatero con esta ley quiere pagarle de manera descarada el apoyo de la SGAE (Sociedad General de Autores Españoles), que preside el gran canario Teddy Bautista y lo hace por el apoyo que siempre le han dado los y las cantantes existentes en España, en cuyo ego brilla la premisa de ser socialistas hasta la medula, lo que les ha llevado hacer hasta una canción o himno alabando a nuestro presidente y a su gobierno, no obstante hay que decir que no todos son de esta cuerda y por consiguiente no aceptan como buena esta ingrata ley, que atenta contra nuestros bolsillos y lo que generara que las ventas disminuyan ostensiblemente. Desconozco si en la actualidad la SGAE, se sigue aprovechando y obteniendo unos pingües beneficios de todos los eventos musicales que se celebran, sean de la etiología  que sean como hasta hace algunos años, donde las orquestas o grupos musicales, tenían que rellenar unos impresos que hacían constar todas las piezas u obras que ejecutaban, el número de veces que lo hacían y el nombre del autor, este documento tenía carácter de obligatorio y a tenor de lo que en el mismo se reseñaba se calculaba el importe que las sociedades, casinos, etcétera, le tenían que liquidar a la Sociedad de Autores. Además, cuando se iba a celebrar un evento bailable era preceptivo que entre los permisos exigidos figurase el de esta Sociedad mediante el cobro del canon correspondiente Es notorio y a todos nos consta, que salvo excepciones muchos cantantes se hacen multimillonarios en poco tiempo, y que por sus conciertos perciben cantidades con muchos ceros. Todas las grabaciones musicales que se llevan a cabo en España están grabadas con los correspondientes arbitrios -el IVA más conocido en Canaria como IGIC-, si esto es así que razón tiene ahora la de implantar una percepción del porcentaje que sea por objeto adquirido, llamado canon_.., es que ya su precio bastante elevado necesita de un revulsivo dinerario y en razón de que, será única y exclusivamente para colmar mucho más las arcas de estos artistas. Es obvio que Zapatero con esta absurda ley lo que pretende es ganarse los votos de este colectivo, perjudicando a muchos millones de españoles, e inflando los beneficios ociosos de estos cantantes, que en algunos casos no merecen ser ni tan siquiera escuchados dada su poca calidad. Pero en esta España totalmente desnaturalizada todo vale, las simplezas de un gobierno totalmente desacreditado que sigue legislando al son de su paladar, sin tener para nada en cuenta los sentimientos de sus moradores. Las instituciones que deberían velar por el cumplimiento de la legalidad, miran hacia otro lado, todo está politizado, como el caso que nos ocupa, hasta en esto del canon la orientación es más política que institucional. Apenas quedan un mes para la celebración de las elecciones generales, los españoles de bien deberíamos tener muy en cuenta que la reelección de Zapatero es funesta para los intereses de todos, que este atípico presidente le ha hecho mucho daño a España y lo que tenemos que hacer es no votarle, ya que el daño que causaría de seguir en la presidencia sería irreversible y el caos alcanzaría una magnitud insospechada. Unámonos todos contra el canon digital o canon de la discordia, no se puede permitir que un gobierno legisle beneficiando a unos y perjudicando a otros. Dice la Constitución que "todos los españoles somos iguales ante la Ley", no permitamos estos gatuperios. La ley del canon digital no tiene razón de ser, no se puede grabar más la economía de cuantos vivimos en este país, ya tenemos bastante con la cesta de la compra, las hipotecas, etcétera, para que ahora nos venga a decir -si quieres un CD o una cinta con contenido musical- te va costar tanto más el canon cuanto y todo como ya he dicho por congratularse con una serie de gente que tienen un ritmo de vida infinitamente superior al resto de los españoles.