Los avisos en zonas turísticas no disuaden a bañistas con "síndrome inmortal"

Los principales municipios turísticos del sur de Gran Canaria comunican a diario si hay mal estado en el mar, como sucede estos días, pero esto no atemoriza a imprudentes con el "síndrome del inmortal" que ignoran las recomendaciones y hasta las banderas rojas.

Ramón Suárez, concejal de Turismo del Ayuntamiento grancanario de San Bartolomé de Tirajana, uno de los de mayor afluencia turística de la isla, afirmó en declaraciones a Efe que los servicios municipales de protección civil envían alertas a todos los establecimientos hoteleros cuando hay una incidencia meteorológica.

A su vez, se envían esos avisos a los operadores y agencias turísticas para que en la medida de lo posible informen a los clientes pero, lamentó Suárez, "siempre hay imprudencias".

Ayer mismo, precisó el edil, falleció ahogada una mujer cuando una ola grande la arrebató de la zona de Montaña Arena, que no es una playa de turismo masivo sino una cala natural frecuentada por pescadores sin servicio de vigilancia a pie, aunque con embarcaciones de salvamento que recorren la costa si se precisa.

"Aquí se mueven miles de personas en el municipio día a día", detalló el edil de Turismo, quien recordó que San Bartolomé de Tirajana cuenta con playas tan turísticas como Maspalomas, San Agustín y Pasito Blanco.

Hoy en las playas "ni siquiera hay viento", precisó Suárez, quien detalla que en todas las de mayor afluencia turística hay servicios "bien cubiertos" de vigilantes de Cruz Roja "los 365 días del año".

Los vigilantes están "a pie de orilla de mar" para avisar a todas las personas que puedan cometer alguna imprudencia "porque siempre hay gente arriesgada que no piensa en lo que le puede suceder", advirtió Ramón Suárez.