Se compró el traje porque pensó que su partido gobernaría

Afortunadamente existe otro tipo de efectos colaterales que nos dejan las elecciones y que son algo menos traumáticos, como el caso de aquel candidato (él) que se mostraba totalmente convencido de que su partido formaría parte del gobierno de San Bartolomé de Tirajana. En este sentido dejamos en el aire la siguiente pregunta para que se coman el coco durante el fin de semana: ¿Qué candidato de una formación política se compró varios trajes y corbatas pensando que su partido formaría parte del gobierno local? ¿Es cierto que entre ellos, uno era de verano pensando en las procesiones de Tunte? ¿Se los pondrá el día de la investidura del nuevo alcalde o, ni tan siquiera será concejal de la oposición? ¿Es cierto que no los podrá devolver porque ya están arreglados? Ahí queda eso. Venga otra... Pues ahí va. En esta interpelación, que no tiene nada que ver con la primera pero que también pertenece al anecdotario electoral, nos gustaría saber si conocen a un votante que preguntó el pasado día 22 de marzo, con bastante mosqueo eso si, por las papeletas del "tripartido" al que pretendía votar. ¿Es verdad que exclamó al presidente de la mesa?: ¡Oiga! ¡Que no encuentro las papeletas del tripartido! ¡Están todas menos esa! La primera duda que se nos viene es si todavía quedan nostálgicos amantes de aquel trío que nunca encontró la postura adecuada. Una vez que a nuestro buen hombre se le explicó que sólo existían papeletas para cada uno de los partidos políticos, ¿alguien imagina cuántas papeletas metió en el sobre? ¿pensaría que los pactos se hacen en las urnas por sufragio universal?