La UD se mete en puestos de descenso tras perder con el Murcia

La UD Las Palmas firmó un domingo negro para olvidar. No solamente por el hecho de que se vuelva sin premio de la Nueva Condomina, sino porque cae en puestos de descenso. Un gol de Chando resolvió el encuentro en la primera mitad, según recoge la web de UD Las Palmas. Como una suerte de pesadilla que se repite a lo largo de toda esta aciaga temporada, especialmente repetida en las últimas jornadas, la Unión Deportiva Las Palmas se topa de frente con rivales que maximizan sus ocasiones. Los ejemplos son incontables, y el Real Murcia fue este domingo otro caso más. Los rivales salieron al terreno de juego muy atenazados, con el miedo propio que se instala en las piernas cuando el filo de la navaja se encuentra cerca. Pero el Murcia, que contaba con la presión ambiental de cara, y la necesidad aún más imperiosa, salió algo más fuerte. Así llegó en el ecuador de la primera mitad el gol local que deshacía la igualada sin goles y llevaba a los infiernos a la escuadra grancanaria. Chando se aprovechaba del único error que había cometido la zaga hasta ese momento y envió el balón al fondo de las mallas. La UD Las Palmas no llegaba en ataque ni reaccionaba al gol recibido. Los nervios parecían mandar a la cabeza. No conseguían quitarse de encima los futbolistas entrenados por Paco Jémez la tensión acumulada y el miedo que se había instalado por la derrota parcial. Así acabó la primera mitad y empezó la segunda. La Unión Deportiva no conseguía hilvanar el juego de otras jornadas. No se llegaba a combinar y llegar a portería rival y, entretanto, el Murcia, respondía con un mayor nivel de atrincheramiento, celoso de tres puntos que les daban la vida. Y eso que Jémez había movido fichas durante el descanso, quitando a un amonestado Darino y dando entrada, en su lugar, a David González. Y lo hizo progresivamente, con la entrada de Diego León y, posteriormente, de Rondón y dejando a tres defensas con la salida de Lamas. Pero no hubo apenas opciones claras de llegar -pese al mejor juego- a portería rival y empatar el partido.