El refinado gusto del Alcalde de Telde por el retrato

Después de unas semanas donde se ha querido convertir el tema del empleo en nuestra ciudad en un tema de confrontación política por parte del alcalde de nuestro municipio no cabe más que realizar una profunda reflexión al respecto. Sobre todo porque el desempleo, que en nuestro municipio supera ya la fatídica cifra de los quince mil, y sobre todo porque la situación de estas quince mil familias no creo que sean objeto de las vanas apreciaciones, a veces mezquinas, de la primera representación en nuestra ciudad. A estos hombres y mujeres en situación de desempleo lo que menos les interesa es si este ayuntamiento, este cabildo o esta autonomía es de un color político u otro, lo único que les importa es que sus legítimos representantes se pongan a trabajar codo con codo por la búsqueda de soluciones a su particular problema, es decir, la falta de un empleo digno, como así lo recoge la Constitución española en su artículo treinta y cinco. No entendemos entonces porque nuestro primer edil no convierte este problema en prioridad número uno de su actividad municipal, aún siendo conscientes que las corporaciones locales tienen poco juego en la competencia de empleo. La única prioridad que ha encontrado ha sido el oportunismo político buscado, más propio de un alcalde que ve peligrar su sempiterno y perenne sillón de la alcaldía, que de un verdadero gestor de la res pública municipal. Eso sí, somos conocedores de su habilidad para falsear los datos e injuriar a otras administraciones que sí que han convertido el tema del desempleo en la ciudad de Telde en prioridad preferente. Así pues, la Consejería de Empleo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias ha desarrollado una política de subvenciones de colaboración con las administraciones locales, como lo ha sido con el M.I. Ayuntamiento de Telde, en materia de políticas activas de formación y empleo. Es muy sencillo, mientras el consejero de Empleo, Jorge Rodríguez, de Coalición Canaria, demuestra su compromiso con los teldenses para seguir avanzando, sumando esfuerzos, de manera responsable y coordinada con los agentes económicos, la decadencia de un alcalde del siglo XX no es ya la solución para una ciudad del siglo XXI. Sus métodos ya no sirven, sus modos de actuar son propios de una “vieja” Canarias que el alcalde de esta ciudad parece ser que quiere mantener. Los resultados ahí los tenemos, son los peores que merece la cuarta ciudad de Canarias para construir el proyecto estratégico de futuro que significa Telde hoy día. Hay que ser rigurosos y objetivos con los datos, y es que cuando nuestro alcalde falsea la realidad municipal, porque realmente no la conoce, viviendo encerrado en el edificio neoclásico del siglo XIX, sede de las casas consistoriales, de la plaza de San Juan, dando la espalda a la ciudadanía y a sus problemas, desde el Gobierno de Canarias se aportan varias subvenciones en materia de empleo. Estas subvenciones han servido para contratar a doscientos setenta y cuatro teldenses en base a varios criterios: Telde como ciudad con una tasa alta de paro, Telde como un municipio productor de tomates y Telde como ciudad de más de noventa y cinco mil habitantes. Más de millón y medio de euros encaminados a buscar la tremenda situación que viven muchos teldenses. Esto sí es política activa de empleo. Estas sí son medidas que ayudan a solventar el problema del desempleo en nuestra ciudad, a pesar de la grave crisis económica que afecta a esta parte del planeta, y que aún así nos parecen medidas escasas para acabar con la lacra del paro. Mientras tanto, la única medida que propone la primera autoridad municipal es la convocatoria de un Foro Anticrisis al que ya no van ni sus miembros y que se ha convertido en el mejor estudio para cualquier pintor del Barroco, donde el refinado gusto por el retrato del alcalde con las autoridades supramunicipales vienen a engrosar el mejor álbum fotográfico de la alcaldía. Presidente del Cabildo, del Gobierno de Canarias, agentes sociales varios…todos en busca de la mejor pose para un buen experto en retratos reales. Esa sí que ha sido su prioridad, la del alcalde de Telde, la foto-retrato que algún día podrá estar expuesta en cualquiera de las salas de exposiciones de nuestra Ciudad. Ahora sí sabemos cuál era el fin de este foro-reunión de algunos amigos, la foto, el retrato y no la aportación de ideas encaminadas a buscar una solución al desempleo en el municipio de Telde. La pena ha sido que la gente que realmente quería aportar algo a ese foro no ha podido y lo han abandonado con la más absoluta de las decepciones. Sin ánimo de querer cansarles más, está demostrado, por tanto, que el Alcalde de Telde, como buen representante del pasado de Telde, de la vieja forma de hacer política que caracteriza a quien lleva más de treinta años en el poder, manipula datos a su antojo y a los de su partido, e intenta desacreditar a otras fuerzas políticas por dos sencillos motivos: primero, para ocultar su manifiesta incapacidad e ineficacia en la gestión que ha llevado a la ciudad de Telde a ser una de las más pobres y con más paro de Canarias, a pesar de los recursos que recibe de otras administraciones, y, en segundo lugar, para continuar perpetuándose en el poder, anteponiendo su posición en la foto a la del bienestar de todos los vecinos.

Antonio Hernández Lobo es Presidente de Coalición Canaria de Telde